El diario El País había anunciado a primera hora de hoy que el miércoles tampoco había sido posible cumplir con el procedimiento, en esa oportunidad por ausencia del hombre. Sin embargo, un comunicado del Ministerio del Interior dado a conocer este jueves aclaró que la colocación del primer dispositivo electrónico de rastreo satelital fue llevada a cabo el miércoles a las 23 horas, cuando finalmente se logró que ambas partes -el agresor y la denunciante- se hicieran presentes.
El equipo, que está compuesto por tres dispositivos, requiere que tanto el agresor como la potencial víctima estén presentes al momento de la colocación, para asegurar su correcto funcionamiento.
Una vez instalado, el equipo permite que tanto el portador de la tobillera como la persona de la que debe mantenerse alejado estén al alcance del rastreador satelital que alerta a las fuerzas policiales si el agresor traspasa el perímetro de restricción establecido por la Justicia.
El diario El País informa asimismo, en su edición digital, que la fiscal de violencia doméstica Alba Corral, de turno desde el lunes y hasta el próximo domingo, pidió que se evalúe la posibilidad de utilizar estos dispositivos en dos casos de violencia familiar "muy graves" que se registraron en las últimas horas.
Según ese medio, la fiscal solicitó que ambos casos fueran valorados de "forma urgente" por los técnicos para que se establezca cuanto antes si es viable la utilización de los aparatos.
Por último, el portal informativo recuerda que a fines del año pasado Corral pidió evaluaciones similares para otros cinco casos, de los cuales hasta ayer no había tenido novedades. Se trata de cinco casos de hombres a los que se fijaron medidas cautelares de prohibición de acercamiento a las mujeres amenazadas.
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